Esta realidad no escapa a la infancia israelí. Un ejemplo ilustrativo está en el siguiente video, donde los niños dejan ver sus intenciones de continuar con las acciones terroristas que llevan a cabo sus padres, incluso, afirman sin titubear, que podrían llegar a matar a quien consideran el enemigo.
El periodista indaga con los infantes sobre las visitas que estos realizan a museos de guerra o de carácter militar.
El paseo deja la duda de si se trata de un museo tradicional, o estos recintos hacen también las veces de centros de reclutamiento semi-militares, donde los niños aprenden a disparar con rifles Kalashnikov, manipular granadas de mano, y simular el secuestro y muerte de enemigos.
Ellos están siendo preparados para militarizarse, un logro que es celebrado en Israel.